Estuvieron aquí durante 8 siglos, desde el 711 al 1492.
En ese tiempo en España convivieron personas de tres religiones: Judíos, Cristianos y Musulmanes.
En bibliotecas, escuelas y centros culturales, su colaboración permitió recuperar escritos de sabios de la antigüedad, traducirlos y transmitirlos.
Pero sus relaciones en otros ámbitos no siempre fueron pacíficas.
Judíos y cristianos tenían prohibidas ciertas profesiones y debían pagar impuestos por no ser musulmanes.
Ningún rey musulmán, por sabio y tolerante que fuese, hizo nada para eliminar esa discriminación.
Y, cuando había problemas, siempre se echaba la culpa a los infieles. Y se hacían pogromos y matanzas, o se les deportaba.
En este documental se muestran las partes positivas y las negativas de este período, la colaboración cultural entre miembros de las tres religiones y los frecuentes problemas de convivencia que provocaba el fanatismo.
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